A todo el mundo le viene bien asegurarse un futuro digno y el status de los que quedan. ¿Y si en el futuro una enfermedad te impidiera trabajar? Sin ingresos recurrentes, empezarías a gastar los ahorros y luego malvender tus bienes. Y si necesitaras cuidados especiales por la enfermedad, necesitarías aún más dinero que antes para pagar al personal que le atendiera. Más que una cuestión de status, es sobre todo una cuestión de dignidad.
Los seguros de vida contratados con la hipoteca, en la mayoría de los casos sólo cubren el pago de la vivienda. De esta forma, si te ocurriera algo, el banco queda protegido pero ¿lo que realmente es importante para ti está protegido? ¿Sabes que es lo que cubre exactamente?
El seguro de vida con clausula hipotecaria obliga a liquidar al banco el importe de la póliza y por lo tanto saldar la hipoteca, sin embargo, realmente es eso lo que necesita mi familia? Tengo que saldar la hipoteca obligatoriamente o puedo utilizar el dinero de mi póliza de vida y continuar abonando las cuotas de mi hipoteca? En Grupo AICO estaremos encantados de estudiar tu caso y ofrecerte las mejores soluciones.
No es obligatorio. Ningún banco puede, por ley, obligar a sus clientes a comprar un seguro de vida únicamente por el hecho de tener una hipoteca con la misma entidad. El consumidor, por tanto, tiene el derecho de reclamar ante los tribunales si se produce esta situación. Por desgracia, no muchos clientes son conscientes de ello.
Para calcular el dinero que tienes que asegurar te aconsejamos seguir estas reglas:
- Multiplica por cinco tu salario bruto anual.
- Si tienes hipoteca o prestamos personales, es recomendable que sumes el importe que te queda por pagar, para que tus herederos puedan hacer frente a las cuotas.
- Si tienes hijos, es recomendable sumar los costes educativos hasta los 25 años, de forma que no tengan que renunciar a sus estudios y formación por falta de dinero.
- Además tienes que pensar en la situación particular de los tuyos ¿Tu pareja tiene sus propios recursos? ¿Hay familiares dependientes?
Suma cada uno de los puntos anteriores y tendrás el capital recomendado a asegurar.
Para contratar un seguro de vida, la compañía aseguradora te preguntara por el estado de tu salud. Te recomendamos que no mientas, porque si falleces por alguna afección que no habías declarado previamente, puede que la compañía se niegue al pago de la indemnización.
Tendrás que contestar un breve cuestionario medico. Si bien estas preguntas variaran en función del capital que quieres asegurar. En caso de edad avanzada o querer contratar un capital muy elevado, la compañía puede exigir que te hagan una revisión médica en un centro concertado por ella.
Como tomador podrás designar a los beneficiarios que desees. En el caso de no hacerlo, se entenderán como beneficiarios los herederos legales. Grupo Aico como tus mediadores te aconsejamos nombrar a figuras concretas como beneficiarios, es una póliza de larga duración por lo que la figura de herederos legales puede variar a lo largo del tiempo.
Para gestionar el cobro del seguro de vida por parte de los beneficiarios, tan solo tiene que ponerse en contacto con nosotros, donde informaremos sobre la documentación necesaria que tienen que presentar los beneficiarios del seguro para recibir el cobro por parte de la compañía.
Entre la documentación necesaria están los datos del asegurado, documentación o referencias del contrato si la tiene, breve explicación de lo sucedido, documentación del médico u Hospital que te atendió, certificado de defunción y datos del banco para cobrar los beneficiarios.
Existe un registro gestionado por la Dirección General de Seguros y Fondos de Pensiones que informa de todos los seguros de vida que tiene contratados una persona.